Sobre el amor de los Ununubios

Sir Johnatan Former Turdren fue un reconocido biólogo nacido en Yorkshire (Inglaterra) en 1893, a pesar de su relativamente poca trascendencia fuera del ámbito académico, su único libro le dió una efímera fama mundial. En dicha obra Turdren relata su viaje a Groenlandia, planeado en un principio para documentar los hábitos de una comunidad de osos polares, que terminó siendo un estudio exhaustivo de una nueva especie bautizada por el mismo Turdren como Ununubios.
Descritos en sus diarios personales como "(...)en apariencia mamíferos, de pelaje blanco azulado(...)con una altura oscilante entre los 40 y los 55 centímetros, recordaban vagamente a los clásicos osos de peluche infantiles(...)"
Tales diarios fueron publicados mas tarde bajo el título "El insospechado mundo de los Ununubios" levantando polémicas alrededor del globo, finalmente JFT fue tachado por la comunidad científica como un cuentista y se autoexilió en México, donde vivió en un manicomio hasta su muerte en 1964, a la edad de 71 años.
A continuación, un extracto del ya mencionado libro.

SOBRE EL AMOR DE LOS UNUNUBIOS

Los ununubios son animales con extrañas costumbres amorosas, si bien al principio pueden confundirse con la monogamía de los pingüinos, un estudio mas detallista demuestra que la tendencia monógama es solo propia de los machos, mientras que a las hembras parecería darles lo mismo aparearse con uno o con otro.
Cuando un ununubio alcanza la madurez, elije a su compañera, pero si es rechazado por esta, o aceptado y luego reemplazado por otro, precede a una especie de suicidio ritual. No se lanzan al vacío en grupo como los lemmings, sino que simplemente se dejan morir. Se apartan de la manada y se quedan quietos en un lugar elegido aparentemente al azar, no comen, no se protegen del clima tempestuoso ni de los depredadores, se quedan quietos esperando la muerte hasta que esta llega.
Es común ver numerosos ununubios en esta situación, diseminados a distancias cuasi equidistantes de la manada, como queriendo señalar al observador la crueldad de las hembras de su especie.
Este "suicidio por amor" lleva a que, a pesar de nacer en proporciones casi iguales, suela haber muchas mas hembras que machos en una manada de ununubios.


La solitaria expedición a Groenlandia de Turdren fue sin duda la experiencia que mas lo marcaría para el resto de su vida, ya que una vez de vuelta en Inglaterra y habiendo sido nombrado Caballero por la Reina, se enamoraría por primera y única vez en su vida. La elegida fue una joven aristócrata cuyo nombre no llegó a trascender, pero a la que Turdren solía llamar en sus diarios "la hija de la luz". Rechazado por su amor imposible y repudiado por sus colegas, pasó sus últimos años escribiendo y dirigiendo obras de teatro para el personal y los internos de la institución mental tijuanense de la que el mismo era paciente.